El 8 de agosto fue señalada la etapa intermedia en el caso de una supuesta conspiración para la obstrucción de la justicia en mi contra.

Mi abogada pidió la palabra y planteó la recusación del Juez. El juez no aceptó, ni la fiscal Monterroso, ni Falla de Fundaterror. Se descompusieron, se expresaron con ira y enojo. Falla insinuó, más bien dijo que yo quería que mi caso lo evaluaran o juzgaran jueces que yo había “comprado”, también publicó algo similar en redes sociales. Bien dice el dicho: “El león juzga por su condición.” Falla cree que todos somos como Fundaterror y buscamos fiscal general, fiscales y jueces ad hoc para que favorezcan sus aberraciones legales, sin los cuales durante toda su carrera todo le ha sido denegado in limine.

Desde el principio pedí hablar, pero se me negó espacio continuamente. Finalmente, a regañadientes, se me dio la palabra.

Con educación añadí que mi criterio era igual que el de mi defensora, pero además yo tenía otro motivo: que el Sr. Juez estaba subordinado incondicionalmente al Ministerio Público.

En un exabrupto de ira el Juez no me dejó terminar y dijo que subiría el audio para que la sala correspondiente decidiera sobre la recusación. Además, en su explosión de paroxismo, se retiró de la sala sin darle fin oficial a la audiencia, haciéndole honor a sus prácticas de violador consuetudinario del debido proceso.

Ahora, conveniente y sospechosamente fui notificado que 40 de los 46 minutos del audio no se pueden escuchar por la presunta interferencia de algún dispositivo desconocido. En consecuencia, ordenaron repetir la audiencia intermedia este jueves, a la que seguramente irán preparados para obstaculizar la recusación, mientras que, por orden del juez, el Ministerio Público “investiga” quien interfirió conveniente a los 40 minutos de audio, para evitar que la sala conociera y decidiera sobre la recusación del juez pelele de la hija de Trucutú.

Lea la resolución completa aquí: https://bit.ly/actividadProcesalDefectuosa.