Amal, la marioneta de los refugiados, recorre la Ciudad de México con un mensaje de esperanza

Es la primera visita de Amal a Latinoamérica, en un momento agudo para los refugiados y migrantes. La marioneta, que representa la figura de una niña siria de 10 años, es un símbolo global de las personas refugiadas

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La marioneta Amal, que representa a una niña migrante siria, saluda a las personas durante su recorrido en la Glorieta de la Diana en la Ciudad de México. EFE | Isaac Esquivel

La marioneta se contonea suavemente, abre y cierra sus párpados con tersura. Extiende sus brazos y simula que abraza, con sus enormes manos, al grupo de niños refugiados que la reciben en el Centro de Encuentro para Acompañamiento Humanitario y la Construcción de Paz (Ceahpaz), en el centro de la alcaldía Tlalpan, al sur de la Ciudad de México.

Amal –así ha sido bautizada la marioneta– le da a la piñata. Junta las palmas de sus manos en señal de rezo o agradecimiento. Muy probablemente, este ambiente festivo arrancará sonrisas por primera vez en mucho tiempo a las familias que aquí residen, y a los 18 niños refugiados que la corretean. 

La marioneta, que representa la figura de una niña siria de 10 años, es un símbolo global de las personas refugiadas. Esta es su primera vez en Latinoamérica, una región que en la actualidad atraviesa una crisis humanitaria y migratoria sin precedentes. Por esa razón, para activistas por los derechos de los migrantes como Ana Valle, la presencia de Amal es muy importante. 

“No había mucha información de lo que Amal significa para el país. Sin embargo, creo que ante el momento, porque no quisiera llamarle crisis en Ciudad de México, que se está viviendo por las exigencias de la población local del traslado de migrantes o el rechazo hacia ellos, permite visibilizar que muchas personas están obligadas a desplazarse. No es una cuestión de voluntades, sino que hay ciertos eventos en países de origen que obliga a las personas”, aseguró Valle, integrante de la organización Nicaragüenses en México quienes junto a Casa Refugiados, organizaron el evento de recibimiento en Ceahpaz. 

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La historia de Amal

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La Pequeña Amal, una marioneta de 3,5 metros de altura que representa a una niña siria refugiada y un símbolo de la lucha por los derechos humanos de los refugiadas, recorrió el centro y sur de la Ciudad de México donde ha cautivado a cientos de personas, principalmente a niños y niñas quienes se maravillan con su andar y sus movimientos. EFE | Isaac Esquivel

La pequeña Amal mide 3.66 metros de alto y ha recorrido miles de kilómetros. En cada ciudad que visita, lleva un mensaje de esperanza y solidaridad para las personas que han huido de su país por crisis, guerras y represión. 

Desde mediados de 2021 —fecha en la inició el proyecto— la marioneta ha visitado 15 países y ha sido recibida por un millón de personas, según explica el proyecto Walking With Amal (Caminando con Amal). 

Una de sus giras más importantes fue en Estados Unidos, debido a que recorrió 40 ciudades y fue vista por miles de personas. Dicho país es uno de los principales destinos para refugiados, exiliados y migrantes latinoamericanos que buscan en ese territorio nuevas oportunidades. 

De acuerdo al informe “Situación de las personas nicaragüenses desplazadas forzadas”, elaborado por el Colectivo de Derechos Humanos Nicaragua Nunca Más, al menos 605 043 nicaragüenses han abandonado su país . 

Esto representa un 9 % de la población total. Dicho éxodo ha sido provocado por el deterioro económico que enfrenta la nación centroamericana y el autoritarismo de Daniel Ortega y Rosario Murillo. 

Lo que representa Amal

“Amal representa a una niña migrante, desplazada, que anda buscando a su mamá. Y es importante porque existe una población muy alta de niñez no acompañada que atraviesan la región en busca de sus padres y su familia. A veces quedan invisibilizados por las personas que estudian el contexto”, explicó Valle tras la actividad. 

En la edificación de estilo colonial de Ceahpaz, niños de todas las edades quebraron una piñata y jugaron con Amal. Controlada por tres personas, la marioneta sigue unos pasos sincronizados, que la llevan de vida y magia. Es imposible ignorarla. 

“Sí, los refugiados necesitan comida y mantas, pero también necesitan dignidad y una voz. El propósito de The Walk (El Camino, en español) es resaltar el potencial del refugiado, no sólo sus terribles circunstancias. La pequeña Amal mide 3.5 metros de altura, porque queremos que el mundo crezca lo suficiente como para saludarla. Queremos que nos inspire a pensar en grande y a actuar en grande”, explica Amir Nizar Zuabi, director artístico de The Walk en el portal del proyecto.

México, testigo de primera fila de la oleada migratoria

En 2022, México fue testigo de un notable aumento de la cantidad de personas venezolanas, cubanas y nicaragüenses que solicitaron asilo en el país. 

Honduras fue el país de origen más representado en la población solicitante de asilo con 26 %, seguido por Cuba (15 %), Haití (14 %), Venezuela (13 %) y Nicaragua (8 %). La mitad de las solicitudes fueron presentadas por hombres adultos, 29 % fueron presentadas por mujeres, 10 % por niñas y 11 % por niños.

De acuerdo con la Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados, en un informe presentado a inicios de este año, México fue testigo en 2022 “de un notable aumento de la cantidad de personas venezolanas, cubanas y nicaragüenses que solicitaron asilo en el país”. 

En 2022, la Comisión Nacional de Ayuda para los Refugiados (Comar), recibió 8971 solicitudes de refugio de nicaragüenses. Es decir, estos son los datos de personas que han solicitado oficialmente resguardo en México. Sin embargo, expertos en migración aseguran que el número de nicaragüenses que transitan por México es mayor. 

“En el contexto de los migrantes nicaragüenses siguen saliendo del país. Siguen atravesando de manera irregular. Pareciera que en México hay una población inferior, pero los encuentros en la frontera norte son mayores”, remarcó Valle. 

Amal visita el Senado, el Zócalo y la Basílica

La marioneta Amal visitó los principales puntos de encuentro de la capital mexicana, y los que representa a uno de los poderes del Estado (el Senado), a la sociedad (el Zócalo) y a la religión (la Basílica de la Virgen de Guadalupe). 

Ana Lilia Rivera, presidenta de la mesa directiva, le dio la bienvenida al Senado de la República y aseguró que “México ha sido y seguirá siendo un refugio para quienes lo necesitan, una premisa que es parte de nuestra historia y cultura, y que está profundamente arraigada a los valores de empatía y hospitalidad de la nación mexicana”.

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