Complices Divergentes
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Régimen sandinista desafía la autonomía de la Iglesia en Nicaragua

El régimen de Ortega-Murillo intensificó su ofensiva contra la Iglesia católica tras las declaraciones de monseñor Rolando Álvarez. En un pronunciamiento, intentó deslegitimar las facultades políticas del Vaticano y atribuirse el derecho de designar líderes religiosos en Nicaragua, una medida inviable según expertos y sacerdotes. Te explicamos


“Soy un obispo de la Iglesia universal. Es decir, fui ordenado obispo para Matagalpa, soy cabeza visible de Matagalpa y administrador apostólico de Estelí, y lo seguiré siendo hasta que Dios quiera”, afirmó con voz firme monseñor Rolando Álvarez en una entrevista con EWTN. Sus declaraciones fueron el detonante para que el régimen Ortega-Murillo emitiera un fuerte pronunciamiento contra la Iglesia católica e incluso sugiriera que la dictadura sandinista tiene derecho a decidir quién puede ejercer autoridad dentro de las iglesias en Nicaragua.

Aunque el pronunciamiento es visceral, no sorprende a los nicaragüenses, ni a la comunidad eclesiástica a nivel mundial. Tampoco debilita la fe de los católicos en el país. Sin embargo, la pretensión del régimen de influir en decisiones del Vaticano es inviable y “descabellada”. En DIVERGENTES te explicamos por qué esta idea no tiene fundamento y qué opinan los religiosos al respecto.

José María Tojeira, padre y vocero de la Compañía de Jesús para Nicaragua, expresó a DIVERGENTES que el discurso de Ortega-Murillo es “tan fanático que me es muy difícil opinar… no veo ningún elemento de racionalidad y mucho menos de verdad o de deseo de diálogo o de explicación en dicho texto… Es más bien el grito de una dictadura acorralada, que quiere reprimir a base de gritos y verborrea cualquier mensaje que le moleste”.

Tojeira se refiere al claro mensaje de la dictadura que enfatiza que “desde púlpitos y tronos vacíos, esos falsos profetas y mercaderes, desconocen a Cristo y sus Doctrinas de Amor y Concordia, Legado Profético a la Humanidad, como Patrimonio de Esperanza, Convivencia Dialogante, Tolerante y Pacífica, entre Herman@s”.

Saña contra la Iglesia católica

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Fotografía del obispo nicaragüense Rolando Álvarez, el 20 de mayo de 2023, en Managua (Nicaragua). Álvarez, condenado en febrero pasado a más de 26 años por traición a la patria tras negarse a abandonar Nicaragua. Foto: Divergentes |EFE

Es conocida la persecución y la saña que ha tenido el régimen contra la Iglesia católica, especialmente contra monseñor Rolando Álvarez, condenado a 26 años de prisión y encarcelado más de 500 días por delitos como “traición a la patria” y “propagación de noticias falsas”. También fue despojado de sus derechos políticos y su nacionalidad nicaragüense.

Martha Patricia Molina, autora de los informes Nicaragua: Una Iglesia perseguida, afirmó que el comunicado del régimen es “fuera de lugar, con un lenguaje ordinario e inapropiado, carente de diplomacia y ética, propio de una persona sin principios ni valores, y denota la falta de conocimientos diplomáticos”.

Según Molina, la sola voz de monseñor Álvarez aterra a Rosario Murillo, ya que él se ha convertido en un símbolo de resistencia en Nicaragua. “Rosario Murillo esperaba ver a un obispo derrotero”, pero, en cambio, se encontró con alguien “completamente lleno de fortaleza y salud”, lo que, según la abogada, fue lo que más le molestó a la copresidenta, especialmente porque Álvarez envió su bendición al pueblo nicaragüense.

La intención del régimen de imponer líderes religiosos alineados a su conveniencia

El pronunciamiento del Ministerio de Relaciones Exteriores (Minrex) deja clara la intención del régimen de imponer líderes religiosos alineados a su conveniencia. “El Estado Vaticano pretende disponer sobre cargos y poderes que otorgan, en Nicaragua, a personas que dejaron de ser nicaragüenses, por conductas impropias e intolerables de promoción de crímenes, políticamente instigados, así como constantes llamados a romper la paz, con todo tipo de violencia, falsedades y planificadas calumnias, infringiendo angustias, sufrimiento y dolor, a las familias de nuestro país”, reza.

Una clara advertencia al Vaticano, que hasta el momento no se ha pronunciado, pero que según los religiosos no tendrá el impacto que busca Ortega.  El papa Francisco ya había expresado su postura el 10 de marzo en una entrevista con Infobae, en la que, al referirse a la situación de monseñor Álvarez, afirmó: “Con mucho respeto, no me queda otra que pensar en un desequilibrio de la persona que dirige (Ortega)”, además de calificar al régimen como una “dictadura grosera”.

El presbítero Mario López, secretario adjunto de la Conferencia Episcopal de Guatemala, señala que la intención del Gobierno de Nicaragua de imponer al Vaticano los líderes religiosos en el país es inviable, ya que implica una usurpación de funciones. Además, recuerda que no le corresponde al Gobierno decidir sobre asuntos de la Santa Sede. 

“En un Gobierno totalitario y dictatorial, por supuesto que eso es posible, pero en ningún sentido va hacer lo correcto, porque estamos en usurpación de funciones. Así como la Iglesia católica no puede poner a un candidato presidencial, tampoco un Gobierno puede poner a una autoridad de la Iglesia católica, porque no le corresponde. Son derechos diferentes, poderes diferentes”, advierte.

Nombramiento de obispos según el Vaticano

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El papa Francisco calificó al régimen como una “dictadura grosera”. Foto: Divergentes |EFE

La manera en que la Iglesia católica nombra a sus líderes, según López, es a través del “nuncio apostólico, después de consultar a muchos, incluyendo a los demás obispos, presenta una terna al Papa y él elige al que le parece más indicado para esa diócesis”, sin embargo, hasta el momentos se desconoce cómo el Vaticano determina quién será el representante de la Santa Sede en las iglesias de Nicaragua, puesto que, no se cuenta con un nuncio. Lo que sí se conoce a través de monseñor Rolando Álvarez, es que él continúa siendo el “obispo para Matagalpa, soy cabeza visible de Matagalpa y administrador apostólico de Estelí”.

En este proceso de selección “el nuncio apostólico es el encargado de buscar la opinión de la Conferencia Episcopal de cada país para que dé nombres de qué personas son las idóneas para un puesto, un cargo como el de obispo…repito y no me canso de repetir, de acuerdo a criterios pastorales pastorales de evangelización, el papa elige a la persona que va a ser obispo”, reafirma el obispo de la Diócesis de Danlí, Honduras y secretario del Secretariado Episcopal de América Central (Sedac), monseñor José Antonio Canales.

Canales deja claro que el Vaticano tiene relaciones diplomáticas con más de 100 países aproximadamente de 190 en el mundo, y “la mayoría de los países del mundo respetan las decisiones del papa con respecto de la designación de obispos incluyendo países musulmanes o de otras religiones. Los Estados no se meten en las decisiones que al interior de la Iglesia se toman. Yo no tengo conocimiento que Irán, por ejemplo, o Irak, o cualquier otro país musulmán, de mayoría musulmana, pero de mayoría apoteósica, haya cuestionado la designación de un obispo en sus países”. 

El secretario del Sedac reafirma que la elección de un obispo no se basa en “criterios políticos sino a criterios de fe, a criterios pastorales, a criterios de evangelización, a criterios de que la persona sea alguien idóneo para llevar adelante todo un proyecto de evangelización en la diócesis a donde lo van a enviar. No es el visto bueno del Gobierno lo que normalmente se toma en cuenta” a la hora de la selección de candidatos, porque “la opinión de ningún Gobierno del mundo se ha tomado en cuenta para la designación de un obispo”. Sin embargo, Canales deja claro que Nicaragua es un caso atípico y que la Santa Sede está trabajando en tomar las mejores decisiones para la Iglesia y sus fieles. 

El obispo de la Diócesis de Danlí en Honduras, reconoce que “la Iglesia es de seres humanos con virtudes y con defectos”, pero tiene claro las intenciones del régimen Ortega-Murillo, alegando que “las miserias humanas siempre han estado en los dos mil años de la Iglesia”, y aunque el pronunciamiento del Minrex “usa vocabulario pesado al final, pero el discurso es el mismo”. 

“El Gobierno de Nicaragua tiene un plan, y solamente no lo ve el que no quiere verlo, y el plan es un Estado totalitario donde no se valen ni las personas, ni las instituciones que quieran contradecirlo”, advierte el obispo hondureño, que además insiste en que el rumbo que lleva Nicaragua “no es influir en la designación de obispos. Eso es secundario. Lo que quieren, en primer lugar, es que no haya ninguna persona y ninguna institución que les adverse. Ya luego lo demás ya son las consecuencias de su plan de un Estado totalitario”.

Situación de la Iglesia en Nicaragua

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Agentes antidisturbios de la Policía Nacional vigilan la entrada de la iglesia de San Jerónimo, durante la celebración de la bajada de la imagen en la ciudad de Masaya (Nicaragua). Foto: Divergentes |EFE

La persecución contra la Iglesia católica y sus fieles continúa en Nicaragua. Actualmente, la Conferencia Episcopal de Nicaragua (CEN), conformada por nueve obispos, enfrenta una fuerte represión gubernamental, lo que ha llevado al exilio a cuatro de sus miembros: monseñor Silvio Báez, obispo auxiliar de la Arquidiócesis de Managua; monseñor Rolando Álvarez, obispo de Matagalpa y Estelí; monseñor Isidoro Mora, obispo de Siuna; y monseñor Carlos Enrique Herrera, obispo de Jinotega.

El VI Informe de Nicaragua: Una Iglesia perseguida, elaborado por la abogada Martha Patricia Molina, documenta las agresiones contra la Iglesia desde abril de 2018 hasta diciembre de 2024. También señala que, aunque el período de la actual junta directiva de la CEN finalizó en 2024, aún no se ha informado sobre la elección de nuevas autoridades..

“Debido a que la Iglesia Católica se enfrenta a graves condiciones de persecución, la Conferencia Episcopal de Nicaragua (CEN) y los diferentes cleros han quedado en silencio y al menos públicamente no se han pronunciado y tampoco en las redes sociales respecto al último escrito del Papa Francisco. Hacerlo, sería motivo para que la dictadura sandinista continúe expulsándolos”, señala el informe.

El informe Seis años de represión a la libertad religiosa en Nicaragua, del Colectivo Nicaragua Nunca Más, también ha documentado la persecución del régimen a la Iglesia. La ruptura de relaciones en diciembre de 2021 provocó el destierro de sacerdotes, el control del espacio público para prohibir procesiones y actividades religiosas, restricciones a la labor social de la Iglesia y la limitación de su atención a la población. También se registraron ataques sistemáticos, expulsión de monjas, cierre de congregaciones, universidades, medios de comunicación y centros educativos religiosos, así como la confiscación de bienes y el ahogo fiscal y financiero de estas instituciones.

Agrega que el régimen pretende separar a la Iglesia católica del Vaticano, una medida imposible pese a su intención de imponer líderes religiosos afines. “Rosario (Murillo) quiere que la CEN pase a ser una dependencia de la vicepresidenta, con mecanismos de apariencia legal, y tener el control absoluto de los líderes religiosos. Esto va a ser imposible, aunque existe una minoría de obispos que se prestan a los deseos de Murillo”, no existe una posición directa en lo que sienten los feligreses. 

Nombramiento de obispos tras convenio con China

El presbítero guatemalteco Mario López enfatiza que en Centroamérica no existe ningún acuerdo entre la Santa Sede y los Gobiernos para el nombramiento de obispos. Sin embargo, advierte que Ortega-Murillo podría intentar justificar su persecución religiosa tomando como referencia el caso de China.

En octubre, China y el Vaticano renovaron por cuatro años un acuerdo sobre el nombramiento de obispos católicos. Aunque no mantienen relaciones diplomáticas, firmaron un pacto en 2018, renovado en 2020 y 2022, que permite a ambas partes revisar las designaciones episcopales.

“Estos cuatro años demuestran que hay confianza mutua. No es solo una extensión, sino un acuerdo de nueva generación”, afirmó a la AFP el teólogo y antropólogo Michel Chambon, investigador de la Universidad Nacional de Singapur, según reportó RFI.

La fe de los fieles no se confisca

Régimen sandinista desafía la autonomía de la Iglesia en Nicaragua

Monseñor José Antonio Canales, de Honduras, asegura que, pese a la persecución del régimen, la fe de los nicaragüenses permanece intacta. Sin embargo, reconoce que la Iglesia ha sido golpeada, lo que ha afectado la práctica religiosa. Muchas comunidades se han quedado sin la celebración de la Eucaristía, la Santa Misa y los sacramentos, mientras que varios sacerdotes han debido abandonar sus parroquias por la represión.

“En el corazón católico de los nicaragüenses no puede haber confiscación, no puede haber destierro. La fe de los nicaragüenses es intocable, porque ahí no puede entrar la policía. No podemos negar que la Iglesia ha sido golpeada, sí muy golpeada en Nicaragua y eso ha afectado a la práctica, no la fe sino la práctica de la fe en los nicaragüenses”, dice Canales. 

Sobre monseñor Rolando Álvarez, Canales es enfático: “Aunque estuviera en otro planeta, sigue siendo el obispo de Matagalpa y el administrador apostólico de Estelí. Punto final. Nunca pensé que les iba a doler tanto, nunca los había visto reaccionar con tanta indignación”.

Por su parte, el padre Edwing Román reafirmó la independencia de la Iglesia para tomar decisiones sobre sus asuntos sin necesidad de la aprobación del régimen. En su cuenta de X (antes Twitter), reaccionó al pronunciamiento del Gobierno con un mensaje dirigido a Rosario Murillo: “Tráguese su vómito señora”.

Furia contra medios católicos internacionales

El Ministerio de Relaciones Exteriores de Nicaragua no solo atacó al Vaticano, sino también al medio que realizó la entrevista, acusando a EWTN de ser un “agravio y un insulto a la Soberanía y Dignidad del Estado nicaragüense”.

Ante esto, EWTN respondió a través de un pronunciamiento, aclarando que “Ni ACI Prensa ni EWTN, su empresa matriz, son páginas o plataformas del Vaticano, sino medios de comunicación independientes y laicos que informan sobre la Iglesia Católica”.