La Iglesia Católica de Nicaragua celebra este año las procesiones del viacrucis “a medias”. Una parte de los templos comenzaron este viernes de Cuaresma la celebración en un espacio limitado, bordeando solo la manzana de las iglesias, mientras que otros ni siquiera pudieron sacar la imagen de Jesucristo de sus parroquias. Según fuentes religiosas, el régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo, a través de la Policía, condicionó esta autorización de salir de acuerdo a los criterios del oficialismo.
Y mientras el catolicismo es amordazado, la vicepresidenta, Rosario Murillo, anunció una serie de actividades religiosas en los distintos departamentos del país: “Las festividades tradicionales de Nuestra Señora de los Remedios, del Señor de Esquipulas, Nuestra Señora de La Paz, en Carazo, la Virgen de Monserrat en La Concepción (Masaya), el Nazareno en Posoltega (Chinandega), San José en Masatepe, Candelaria… la Virgen de Candelaria en Chichigalpa (Chinandega)”, enumeró, sin decir nada sobre las prohibiciones de las procesiones de la jornada más importante del catolicismo.
“Lo que nosotros manejamos es que es una cuestión selectiva, ellos (la Policía) están eligiendo de acuerdo a qué tanto habla el sacerdote o qué tan crítico ha sido contra el Gobierno, por eso es que hay muchas parroquias que lo harán dentro del templo, otros solo darán la vuelta a la manzana”, aseguró un integrante de la Pastoral de comunicación de una parroquia de Managua.
Un jerarca católico de la Arquidiócesis de Managua, por su parte explicó bajo anonimato que existe la “duda” de si la prohibición fue a nivel general, como lo han referido diferentes medios, aunque asegura que en su mayoría, las imágenes fueron impedidas salir del templo. “En Managua muchas procesiones (fueron suspendidas), en León, Carazo parece que igual, pero San Miguel Arcángel de Managua lo está anunciando para esta tarde (el viacrucis)”, señaló el religioso.
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Según la tradición religiosa, este 24 de febrero estaba previsto salir el primer viacrucis de la Cuaresma a las diferentes calles del país, como antesala a las actividades de la Semana Santa, que para este año está programada entre el 2 y 8 de abril. Sin embargo, en algunas iglesias de León y Chinandega, así como en otros departamentos, trataron de hacer la procesión, pero las autoridades lo impidieron. Regresaron las imágenes de Cristo y a los creyentes a los templos.
En Nandaime, municipio del departamento de Granada, las procesiones de Cuaresma y Semana Santa también fueron suspendidas. La imagen de Jesucristo se quedó a las puertas del templo esperando la salida tradicional.
“La verdad es que no se contempla la salida por dos razones: por presencia policial de vez en cuando y por las insinuaciones del Estado de Nicaragua”, refirió otro sacerdote de un templo de Matagalpa, quien por seguridad omitiremos su nombre.
Otra feligresa de ese departamento, ubicado en el norte del país, dice que este viernes en su iglesia sí pudieron realizar el recorrido del viacrucis, pero solo alrededor de la manzana del templo parroquial. “Antes estos recorridos eran por todo el pueblo, pero en esta ocasión solo se autorizó bordear las cuatro calles alrededor de la parroquia”, señaló la devota.
Por su parte, la parroquia Santa María de los Ángeles, en Managua, informó que este viernes fueron visitados por el inspector Orlando Cano, “informándonos que están prohibidas las procesiones de viacrucis y otras durante la Cuaresma y Semana Santa”. Debido a esto, anunció que dichas actividades se llevarán dentro del templo.
“De momento no es algo que sea generalizado, pero efectivamente están eligiendo a quiénes otorgarles permiso y a quiénes no. O sea, existe la orden de que si el templo quiere salir, primero el sacerdote debe pedir la autorización al jefe policial de su distrito. Es la orden”, agregó el integrante de la Pastoral de comunicación.
Según las fuentes consultadas, desde el pasado miércoles de ceniza, la Policía comenzó a visitar diferentes templos de Managua y otros departamentos para notificar verbalmente que los permisos a procesiones estaban negados, y atribuyeron la medida por “razones de seguridad”. “Hay mucha incertidumbre por las visitas de la Policía”, dijo la fuente de la Arquidiócesis.
Cardenal Brenes: “obedezcan”
Hasta el momento, ni la alta jerarquía de la Iglesia Católica ni la misma Policía han emitido algún comunicado en el que se oficialice las disposiciones o prohibiciones de estas actividades religiosas. Sin embargo, de boca de la fuente de comunicación, la orden que ha dado el cardenal Leopoldo Brenes al respecto es que “obedezcan” las orientaciones dadas verbalmente por la Policía.
“El cardenal les ha dicho a todos los sacerdotes que obedezcan, que vayan a las distintas delegaciones policiales y vean si hay permiso, sino que se haga adentro. Es decir, la orden es no confrontarlos, pero de que haya alguna hoja oficial sobre esto, no hay nada”, destacó la fuente religiosa.
Los católicos de Nicaragua celebraron el 22 de febrero el miércoles de Ceniza, que establece el inicio del tiempo de Cuaresma, representada con la marca de la cruz en la frente, máximo símbolo del inicio del tiempo litúrgico de la Cuaresma. En Managua, el cardenal Brenes instó a los fieles a orar, ayunar y hacer buenas obras durante este tiempo de consagración.
Para la abogada e investigadora Martha Patricia Molina, estas prohibiciones de las actividades de piedad popular representan un ataque más del régimen sandinista contra la Iglesia Católica y la libertad religiosa de todos los ciudadanos.
Para Molina, Ortega-Murillo tiene la intención “desalmada e ilógica” de aniquilar la fe católica del país, “porque sabe que la Iglesia Católica es la única institución creíble, respetada y amada que a la luz del evangelio está anunciando y denunciando todas las arbitrariedades y maldades que comete la dictadura”.
La investigadora cree que esta es una medida “dolorosa” del régimen en contra de un pueblo creyente que por siglos ha celebrado la Cuaresma. “Pero, a pesar de este dolor el pueblo católico rezará más y eso hará que estemos más unidos que nunca, esas acciones nos fortalecen más”, manifestó Molina.
En tanto, la fuente arquidiocesana lamenta que la dictadura sandinista esté negando a los devotos ese derecho de celebrar este viacrucis, “que es una piedad popular de los católicos desde siglos atrás”.
El pasado 21 de febrero, Ortega compareció públicamente para arremeter en contra del catolicismo, tildando a sus sacerdotes, obispos y el mismo Vaticano de ser una “mafia” que no permite que los católicos elijan por voto directo al Papa y los cardenales.
“¿Qué respeto le puedo tener a los obispos que he conocido en Nicaragua, si eran somocistas? Era un niño cuando pasó el funeral de (Anastasio) Somoza (García, en 1956) y los obispos enterraron a Somoza como príncipe de la Iglesia, es decir como si era un cardenal de la Iglesia Católica”, espetó el dictador.