El régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo ejecutó un operativo con oficiales de inteligencia de la Policía Nacional para detener a Wildaurora Zeledón Castillo, jueza quinto de Distrito Penal de Juicio de Managua, confirmaron fuentes de la institución a DIVERGENTES. La judicial, que sentenció a varios años de cárcel a presos políticos de la dictadura sandinista, fue capturada el pasado 22 de febrero a eso de las seis de la tarde cuando regresaba a su residencia.
La casa de la jueza Wildaurora Zeledón está ubicada en Monteclara, un complejo habitacional situado a la altura del kilómetro 13 de la carretera hacia Masaya. Según la información confirmada por este medio de comunicación, los oficiales de inteligencia llegaron vestidos de civil a eso de las tres de la tarde en busca de Zeledón Castillo, sin embargo, no la encontraron y decidieron esperar a la par del único acceso que tiene el residencial.
A eso de las seis de la tarde, unos metros antes de llegar al portón del residencial, los oficiales de inteligencia que iban abordo de vehículos con vidrios oscuros detuvieron a la jueza y de acuerdo a la misma fuente policial fue trasladada a la Dirección de Auxilio Judicial (DAJ), mejor conocido como “El Chipote”.
Hora y media más tarde, a las 7:30 de la noche, varias patrullas de la DAJ allanaron la casa de la jueza y se llevaron computadoras, celulares, memorias USB y una cantidad de documentos que estaban en la habitación de Zeledón Castillo.
Tres días después de la captura de la jueza, ni el Ministerio Público ni la Policía Nacional han emitido algún comunicado informando el motivo de la detención de Wildaurora Zeledón. Una versión extraoficial apunta a que la judicial estaba planeando su salida del país. No obstante, esta versión no pudo ser confirmada por DIVERGENTES.
La fuente policial consultada por este medio de comunicación tampoco quiso ahondar sobre el motivo de la detención de la jueza. Lo único que respondió es que Zeledón Castillo iba a ser investigada y su estancia dentro de la DAJ iba a depender de órdenes de “arriba”.
Hasta la publicación de este artículo la jueza no había regresado a su casa. DIVERGENTES también buscó información sobre su detención en el sistema del Poder Judicial, pero tampoco obtuvimos resultados.
Detenciones similares
El caso de la jueza Zeledón Castillo no es el único registrado dentro de las estructuras del régimen Ortega-Murillo. El 14 de octubre de 2022 Roberto Larios, vocero de la Corte Suprema de Justicia (CSJ), fue detenido en su casa y trasladado hasta “El Chipote” donde estuvo alrededor de cuatro meses. El periodista y también abogado trabajó en esta institución desde el 2009 y era uno de los funcionarios más allegados a Alba Luz Ramos, presidenta de ese Poder del Estado.
Otro caso es el de los hermanos María José Camacho Chévez y Hans Camacho Chévez, quienes junto a Moisés Astorga Saénz, fueron trasladados el pasado mes de noviembre a la DAJ bajo investigación. Todos, al igual que Larios, eran parte del círculo cercano de Ramos, según fuentes judiciales.
María Camacho era asistente de Ramos, mientras que Hans Camacho se desempeñaba como jefe de informática del Tribunal Nacional Laboral de Apelaciones. Astorga era asesor de la magistrada. Los tres fueron acusados de “propagación de noticias falsas” y “menoscabo a la integridad nacional”. Todos, incluido Larios, fueron desterrados el nueve de febrero de este año y enviados hacia Estados Unidos.
Uno de los casos más significativos de funcionarios del régimen que fueron encarcelados es el de Adolfo Marenco, exsubdirector de la institución y jefe de investigación y de inteligencia política, quien fue detenido a mediados de enero de este año. Hasta la publicación de este artículo el régimen sandinista tampoco ha informado del por qué de su detención y tampoco si fue puesto en libertad.