Cristóbal Geovanny López Acevedo, conocido en redes sociales como Tropi Gamer, niega que era militante del Frente Sandinista, sino que se describe “solo” un simpatizante del partido de Gobierno. “Yo simpatizaba con el Frente Sandinista, como muchos de los presos políticos”, aseguró López a DIVERGENTES en una sala de un hotel de Ciudad de Guatemala, donde fue desterrado el pasado 5 de septiembre junto a 134 reos de conciencia del régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo.
López, de 34 años de edad, se dio a conocer en 2020 por un video que se viralizó en redes sociales, en el cual fue interrumpido abruptamente por agentes de la Policía mientras realizaba un “en vivo” del discurso de Daniel Ortega en el aniversario del triunfo de la insurrección sandinista, que se celebra cada 19 de julio en una plaza de Managua.
Desde 2020, el régimen Ortega-Murillo realiza estos actos en circuitos cerrados, es decir, escoge a los invitados para asistir de forma presencial. Esto no era así en años anteriores, cuando los sandinistas realizaban concentraciones masivas para mostrar su músculo político, y era visto como un baño de masas para la pareja dictatorial.
Siendo uno de los pocos invitados del 19 de julio de 2020, López agradeció a los coordinadores sandinistas del Distrito III de Managua que lo llevaron al evento, al que sólo seleccionaron a 700 personas a nivel nacional para escuchar el discurso de Ortega de forma presencial. “Para mí es un honor estar acá”, dijo López, minutos antes de que fuera golpeado por cuatro hombres que reconoció como de “la seguridad del Estado”.
Recibe nuestro boletín semanal
Horas después de la golpiza, López subió un video en el que contó lo que le sucedió y dijo que “antes de empezar (a narrar), soy una persona que apoya a Daniel Ortega, que apoya el modelo socialista del Frente Sandinista. Eso que quede claro a todo el mundo”. Agregó ser “más sandinista que cualquiera” y aseguró que defendió al régimen desde la Rebelión de Abril de 2018, reprimida a fuego y sangre por la dictadura. López contó que aquel día, después de que los agentes revisaron su celular, “se encontraron que sólo habían cosas a favor del comandante Daniel Ortega” en su dispositivo.
El nacimiento del “Tropi Gamer“
Este viernes 7 de septiembre de 2024, López cuenta que se desencantó del partido sandinista a partir de lo que le sucedió el 19 de julio de 2020. “Ahí los fui conociendo un poquito”, dice con una sonrisa irónica.
Días después de recibir aquella golpiza, López intuyó “una gran oportunidad de hacer algo” por la popularidad que había adquirido por el video viral. “Sacar algo bueno de lo malo que me había pasado”, dice.
Entonces empezó hacer transmisiones en redes sociales sobre videojuegos y “funcionó”, dice López, quien se autonombró Tropi Gamer. Incluso, el término Tropi lo tomó por ser el diminutivo del apodo que le pusieron en redes sociales para compararlo físicamente con “Tropikong”, un gorila animado que es el logo de una tienda de electrodomésticos en Nicaragua.
Tropi Gamer dice que el primer mes de monetización en redes le dejó un pago de Facebook por 400 dólares. Después, la página “subió espontáneamente” en seguidores y los pagos aumentaron, pero se niega a decir la cantidad de dinero que generaba. “Como me iba bien con la página me alejé de conflictos políticos y me dediqué a trabajar de manera neutral”, afirma.
Arrestado en el cumpleaños de su mamá
Así estuvo durante un tiempo, sin referirse a asuntos políticos y dejó de adular a Ortega y a su partido, hasta que días después de las elecciones de 2021, cuando Daniel Ortega y Rosario Murillo se reeligieron sin competencia para otro período más, López cuestionó la legitimidad de estos comicios. “Si yo fuera militante sandinista me diera vergüenza decir que ganamos”, dijo en esa transmisión. “Los únicos que fueron a votar fueron los mismos militantes sandinistas y la gente que tiene que ir a votar porque si no pierden el trabajito”, agregó.
Por esas declaraciones no recibió ningún tipo de amenazas. Continuó trabajando en sus redes sociales, entre ellas la plataforma TikTok. Sin embargo, a raíz de una serie de videos que transmitió en su página, previo a la coronación de Sheynnis Palacios como Miss Universo, en los que la defendía de las burlas de unas presentadoras de televisión de los canales de la familia Ortega-Murillo, Tropi Gamer fue arrestado. “Me arrestaron por apoyar a Sheynnis Palacios, porque ella no tiene la doctrina de ellos (Ortega y Murillo)”, remarca.
Fue capturado el 22 de noviembre de 2023, tres días después de que Sheynnis Palacios recibiera la corona de Miss Universo. Según López, un dispositivo de motorizados y un carro con una decena de policías lo detuvieron. En ese momento caminaba a comprarle un regalo a su mamá, porque ella estaba de cumpleaños.
A raíz de la celebración por el triunfo de Sheynnis Palacios, quien participó en marchas en contra del Gobierno sandinista durante la crisis de 2018, varias personas fueron arrestadas, entre ellas, Tropi Gamer. Además, desterraron a la directora de Miss Nicaragua, organización que preparó a Palacios para el certamen de belleza.
En todo este tiempo, la Miss Universo nicaragüense no se refirió a ninguno de los casos ni pidió la liberación de las personas apresadas por celebrar su corona. López, sin embargo, dice que no está “resentido” con ella, ni se arrepiente de haberla defendido. “La defendí porque era una nicaragüense que estaba triunfando en el certamen; era la favorita del Miss Universo, era una representación grande para el país que gana. Eso ayuda a un país, desgraciadamente en Nicaragua no”, resalta López.
Tropi Gamer incluso entiende que Palacios no se pronuncie por los arrestados “debido a las responsabilidades” que tiene con la franquicia de Miss Universo. “Ella (Sheynnis) tiene que ser neutral, aunque se calle cosas que quiere decir”.
El tiktoker cree que la Miss Universo no hará, por ahora, ninguna declaración política, pero “estoy seguro que en algún momento ella va a expresarse”.
El infierno de la 300
López tiene el pelo recién cortado, luce un poco delgado y pálido, pero él asegura que ha bajado de peso porque se puso a dieta, ya que “estaba muy gordo”, dice mientras se ríe. “La cárcel es muy dura, pero no se me quitó ni el sueño, ni el hambre”, agrega.
Estuvo detenido unas pocas horas en el Distrito III de Managua, una estación de policías que los desterrados describen como “horrible” por los malos tratos a los que fueron sometidos.
Los primeros días en la cárcel se sentía “confundido y con temor”. Dice que lo juzgaron por diferentes delitos, entre ellos, pornografía infantil, narcotráfico y crimen organizado. “Eran juicios falsos”, afirma López, y cuenta que las pruebas en su contra eran videos bajados de internet y testimonios de oficiales de la Policía orteguista.
Luego fue llevado a la 300, el área de celdas de máxima seguridad de la cárcel La Modelo de Managua. Durante nueve meses permaneció en una celda de tres metros de largo por dos de ancho, donde no podía caminar, y apenas se sentaba y se acostaba. Era un espacio completamente cerrado, con una puerta blindada, donde el calor era insoportable. Solo era sacado durante 10 minutos a la semana para recibir sol.
“Me arrepiento de haber apoyado al Frente Sandinista”
Sin embargo, lo más difícil que vivió en la cárcel fue no poder abrazar a su mamá, quien lo llegaba a visitar, pero sólo podía verla a través de un vidrio blindado enfrente, mientras hablaban por medio de un teléfono. “No recibí tortura, ni física ni verbal, pero no poder abrazar ni besar a mi madre me afectó”, señala.
Durante los interrogatorios, sólo en algunas ocasiones le mencionaron su pasado sandinista, pero luego dice que lo trataron “igual que a los demás presos políticos”.
En su paso por la cárcel López tuvo mucho tiempo para reflexionar sobre el apoyo que en algún momento dio al partido en el poder. “Me arrepiento de apoyar al Frente Sandinista, porque si a la misma gente que los apoya los tratan así, podés darte cuenta de cómo pueden tratar a los que son contrarios a ellos del todo”, apunta.