El controvertido exmagistrado del Consejo Supremo Electoral (CSE), Roberto Rivas Reyes, fue ingresado de emergencia a la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) del Hospital Metropolitano Vivian Pellas, por complicaciones de salud asociadas a la Covid-19, confirmaron fuentes médicas a DIVERGENTES. “Llegando a la sala de UCI los doctores dijeron que tenían que intubar”, aseguró también una fuente cercana al expresidente del CSE consultada por DIVERGENTES. De acuerdo a los datos médicos de Rivas Reyes, su estado de salud es delicado porque tiene los pulmones obstruidos y su salud, hasta ahora, no evoluciona favorablemente.
Rivas Reyes, sancionado por corrupción por el gobierno de Estados Unidos en diciembre de 2017, fue ingresado a la UCI el domingo tres de octubre. Las fuentes médicas consultadas por este medio de comunicación confirmaron que fue intubado de inmediato y su estado es “gravísimo” e incierto.
Según los especialistas, todavía no hay condiciones para brindar un pronóstico de posible recuperación para el expresidente del CSE, quien también es acusado de coordinar los fraudes electorales de los Ortega-Murillo en las elecciones posteriores a 2006. “Es muy pronto para saberlo porque apenas empezaron a tratarlo con los medicamentos. Hasta en los siguientes dos a tres días podremos saber para dónde va”, indicó una de las fuentes médicas.
Además de estar intubado, el expresidente del CSE, tiene que lidiar con una apnea del sueño, un trastorno potencialmente grave que complica la respiración y provoca ronquidos en las personas. A esto se suma el problema del sobrepeso y otras enfermedades que podrían complicar su recuperación.
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Desde su hospitalización Rivas Reyes recibió tratamiento médico y fue sometido a exámenes de laboratorio. Sus hijas también están contagiadas de Covid-19, según informaron las fuentes médicas, aunque estas se encuentran estables y fuera de peligro.
Hasta antes de su hospitalización, Rivas Reyes permanecía en su casa en Managua ubicada en residencial “Los Almendros”, y cada quince días viajaba a su mansión en San Juan del Sur. En 2020, en el inicio de la pandemia de Covid-19, Rivas y su familia pasaron confinados alrededor de diez meses en su casa de la playa.
De acuerdo al Ministerio de Salud (Minsa) los casos de Covid-19 en Nicaragua ascendieron a 718 la última semana. Mientras el Observatorio Ciudadano contabiliza 1,103 casos sospechosos. Según registros de ambas organizaciones, el mes de septiembre fue el de mayor contagios desde el inicio de la pandemia en el año 2020. En los 30 días se contabilizaron 2 713 y 5 230, respectivamente.
La trayectoria de Rivas Reyes
Roberto Rivas Reyes fue magistrado del CSE desde el 2000 hasta el 2018. En diciembre de 2017 fue sancionado por el gobierno de Estados Unidos por fraude y corrupción. Si bien su carrera política iba a pique, esta designación lo sacó del juego político definitivamente.
Como magistrado del CSE, Rivas Reyes orquestó varios fraudes electorales que permitieron a Daniel Ortega consolidar una dictadura dinástica en Nicaragua. El gobierno estadounidense detalló en aquel momento que el expresidente del CSE había trabajado para el mandatario sandinista durante más de una década para negar a los nicaragüenses el derecho a elecciones libres y transparentes.
Hasta antes de la sanción Rivas Reyes llevaba una vida ostentosa. Una investigación periodística publicada en Confidencial en 2018, reveló que junto a sus hijas alquilaban una mansión en Madrid cuyo costo mensual era de 12 000 euros. Era una propiedad valorada en nueve millones de dólares.
Sus hijas también fueron parte de esta vida de lujo que se permitía un funcionario cuyo salario mensual no sobrepasaba los 5 000 dólares. Una investigación periodística del diario La Prensa, expuso que a la edad de 22 años, Stephanie Rivas Delgado, hija Rivas Reyes, era presidenta de la corporación ACE AEI Inc., una sociedad propietaria del jet matrícula N347GA, que era utilizada por el expresidente del Poder Electoral para viajes personales.
En 2009, el diario La Nación, de Costa Rica, reveló que la sociedad Chibulú del Oeste S.A., propiedad de Roberto Rivas y su esposa Ileana Delgado Lacayo, era dueña de un complejo habitacional de cuatro residencias en la exclusiva comunidad Villa Real, con vista al cantón de Escazú.
Otras investigaciones del diario La Prensa, revelaron que sus dos hijas ingresaron a Nicaragua en el 2009 nueve vehículos a los que la Dirección General de Aduana rebajó impuestos. Al menos tres vehículos comprados por la esposa de Rivas tenían un precio comercial, en ese entonces, de 3.5 millones de córdobas, mientras que otros tres que trajo su hija costaban 1.6 millones de córdobas.
En 2018 Confidencial de igual forma reveló que Rivas Reyes y su familia abordaron un vuelo privado desde España hasta Nicaragua en un jet bimotor Gulfstream V, matrícula OE-IIS, uno de los jet ejecutivos más avanzados del mundo, cuyo costo oscila entre 120 y 150 mil euros.