Claudio Galeno de Magalhães Linhares, quien fue el primer esposo de la expresidenta de Brasil, Dilma Rousseff, es uno de los afectados por las confiscaciones de propiedades que ejecutó el régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo en el Condominio Amazonia, ubicado en el Reparto San Juan, en Managua, el pasado 17 de febrero.
El brasileño es periodista y fue militante del Comando de Libertad Nacional (COLINA). Se casó con Rousseff en 1968, cuando ella tenía 20 años. Ambos lucharon contra la dictadura militar de Brasil entre 1964 y 1985. Después de separarse de la expresidenta del Partido de los Trabajadores, Magalhães Linhares conoció a la nicaragüense Mayra Vega, una militante sandinista histórica, quien durante los ochenta estuvo ligada a la diplomacia de la Revolución Sandinista, y actualmente es una allegada a la pareja presidencial. Ambos están retirados.
Magalhães Linhares vive en Nicaragua desde hace al menos treinta años, específicamente en el Condominio Amazonia, donde también residían las intelectuales feministas Sofía Montenegro y Azahálea Solís, quienes salieron del país tras ser despojadas de su nacionalidad por los Ortega-Murillo.
A pesar de que solo Montenegro y Solís fueron acusadas por la dictadura de “traición a la patria”, y por ende sus bienes confiscados, el régimen procedió a ocupar todos los apartamentos ubicados en ese pequeño complejo residencial, un acto de facto que demuestra la inseguridad jurídica en Nicaragua. A la dictadura Ortega-Murillo no le importó que la familia Magalhães Linhares-Vega fuera cercana a su administración. De hecho, las dos hijas del matrimonio son funcionarias del gobierno actual.
Anna Laura Vega Linhares, según su perfil de LinkedIn, se desempeña como gerente administrativa en la Empresa Nicaragüense de Electricidad (ENEL). El brasileño tiene una segunda hija llamada Iara Vega Linhares, residente en Bienne, Suiza. Según un reporte del oficialista El 19 Digital, publicado en el 2017, en ese año la ciudadana representó a Nicaragua como diplomática en la promoción del arte, cultura y raíces nicas en el exterior.
La artista expuso en ese momento una muestra fotográfica titulada “LiensLazos”, que ya había sido expuesta en su primer tiraje en Suiza, Nicaragua, Estonia y Finlandia entre 2012 y 2015, “con un libro que salió en conmemoración de los 25 años del hermanamiento Bienne/ San Marcos, Carazo”, señala la publicación oficialista.
Magalhães Linhares proviene de una tradición de izquierda, de la que forma parte el actual presidente brasileño Lula Da Silva. De acuerdo a un artículo del diario Perfil de Brasil, Magalhães Linhares mantiene “buenas relaciones” con Rousseff. Los gobiernos de la izquierda latinoamericana, excepto el de Lula, se han condenado la última embestida represiva de los Ortega-Murillo, que ha despojado a 317 nicaragüenses de su nacionalidad.
Las confiscaciones

Según conoció DIVERGENTES, la Intendencia de la Propiedad entregó notificaciones a 16 viviendas de Amazonia para revisar sus casos por supuesta “ocupación de las viviendas”. En la reunión, les dijeron que los documentos de compraventas que tenían los propietarios quedaban anulados porque eran “irregulares”, y por lo tanto pasaba a su propietario anterior, el Ministerio de Desarrollo Agropecuario y Reforma Agraria (MIDINRA).
A los dueños de los 16 apartamentos les informaron que si querían seguir viviendo en ellos debían pagar un canon de arrendamiento de 500 dólares al Estado.

Los dueños de las propiedades tienen títulos individuales de las viviendas, inscritos en el Registro de la Propiedad, y revisados por las leyes de la propiedad en los gobiernos posteriores de Violeta Barrios de Chamorro, Arnoldo Alemán, Enrique Bolaños, e incluso hasta el segundo período de Daniel Ortega.
Estas son las primeras confiscaciones que se conocen luego de que el régimen Ortega-Murillo despojó de su nacionalidad a 94 personas, contra las que ordenó ocupación de sus bienes y los declaró prófugos de la justicia por ser “traidores a la patria”, sin que estos ciudadanos siquiera hayan tenido un juicio en su contra.
Entre estas personalidades se encuentran los escritores Sergio Ramírez Mercado, Gioconda Belli; el obispo Silvio Báez, defensores de derechos humanos, como Vilma Núñez, periodistas, políticos, empresarios, religiosos, entre otros activistas. Todos han recibido la solidaridad de países considerados de izquierda, quienes han ofrecido la patria a todos los desterrados.