El régimen de becas de la confiscada Universidad Politécnica de Nicaragua (Upoli), ahora llamada Universidad Nacional Politécnica (UNP), que beneficiaba a miles de estudiantes de escasos recursos, fue cambiado de manera inesperada y sin aviso alguno el pasado 4 de abril.
Entre despojos de becas, cambios de requisitos y disminución de los estipendios, los estudiantes ya no obtendrán varios beneficios académicos por los nuevos ajustes impuestos por la administración de la universidad, que es leal a la dictadura de Daniel Ortega y Rosario Murillo.
Entre los principales cambios está el despojo de la beca de almuerzo, que brindaba alimentación a estudiantes de todas las carreras que mantuvieran un promedio académico mínimo de 70%.
Ahora únicamente los que cursan la carrera de Enfermería cuentan con este beneficio, informaron estudiantes de la UNP a DIVERGENTES. Cabe destacar que desde el inicio del año lectivo 2024, los estudiantes no han recibido esta beca, pero ahora “lo oficializaron”, señalan los jóvenes.
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Promedios académicos de casi 100% para aplicar a becas
La beca monetaria, la principal con la que contaban los estudiantes, también fue modificada radicalmente. Los estudiantes que deseen ser beneficiados con la misma, deben contar un promedio académico mínimo del 95%, cuando antes el promedio exigido era del 70%.
Además, anteriormente este beneficio ofrecía tres montos económicos: la beca A que brindaba un estipendio de 1 200 córdobas, la B con un estipendio de 1 100 córdobas y la C, con un estipendio de 1 000 córdobas. Ahora solo habrá un solo estipendio menor de 1 000 córdobas, pero el monto exacto aún no ha sido revelado a los estudiantes.
“No nos han dicho de cuánto va a ser la beca. Se dice que va a ser de 500 córdobas o menos. En mi salón había 15 personas que tenían esta beca y con el nuevo requisito del promedio de 95 puntos, solo dos personas pueden aplicar, una compañera y yo. Vamos a aplicar, pero igual no creo que nos la den. No es seguro”, dice una joven de 22 años.
La beca monetaria, ahora llamada beca de excelencia académica, beneficiaba a más de 1 500 estudiantes, de acuerdo a la denuncia de los jóvenes. Ahora no se sabe cuántos de ellos pueden aplicar con los nuevos requisitos.
Según los estudiantes, el promedio exigido es “casi inalcanzable”, ya que ni los estudiantes de excelencia académica con promedios entre los 90 y 94 puntos son elegibles para recibir este beneficio.
UNP no ha brindado comunicación oficial sobre los cambios
La UNP todavía no ha informado sobre los nuevos cambios para otros tipos de becas como la beca de albergue, que ofrece estadía a estudiantes que viven en departamentos fuera de Managua, y las becas culturales y deportivas. Lo único que saben los estudiantes es que también hay nuevos requisitos para estas.
La universidad no ha brindado un comunicado oficial sobre el repentino cambio del régimen de becas, ni ha informado debidamente a los estudiantes. La información ha sido revelada por los presidentes de su sección y miembros de la Unión Nacional de Estudiantes de Nicaragua (UNEN), el brazo represivo en las universidades de la dictadura.
Según una joven consultada por DIVERGENTES, los beneficiarios fueron llamados a firmar sus contratos de becas el pasado 3 de abril, pero el día anterior les informaron que estas fueron canceladas y debían realizar nuevamente el proceso de solicitud, ahora acorde a las nuevas condiciones.
“Después que cancelaron la firma de las planillas de las becas, los de UNEN llegaron al salón a pedir que llenáramos un formulario con información personal nuestra y con una encuesta de satisfacción de la universidad, los profesores y la educación. Una semana después, nos dijeron que debíamos meter papeles para la beca de nuevo, ya que no iba a ser para todos. Ni siquiera nos dieron un anuncio oficial. Todos andamos confundidos”, señala la estudiante.
Exoneran aranceles, pero suspenden beneficios
Aunque las razones de este cambio no han sido explicadas por la universidad, los estudiantes consideran que es debido a la exoneración de los aranceles que se aplicó a partir de este 2024. “Como la universidad la volvieron totalmente pública, creemos que es por eso que quitaron las becas”, expresa.
Sin embargo, el resto de las universidades públicas del país que no tiene un origen confiscatorio, tampoco exigen aranceles a los estudiantes y aún así mantienen programas de becas accesibles para estudiantes de escasos recursos; pues es un derecho establecido en la Ley de Autonomía de las Instituciones de Educación Superior.
El número de estudiantes afectados por el cambio es desconocido, ya que la cantidad de becas brindadas solo ha sido informada de manera esporádica y desordenada por las instituciones estatales a través de sus páginas web.
Según estas, más de 400 estudiantes tenían la beca almuerzo, y al menos 1 500 la beca monetaria, únicamente en la sede de Managua. Muchos de estos estudiantes eran beneficiados al mismo tiempo con ambas becas.
Estudiantes afectados están indignados
Según los jóvenes consultados por DIVERGENTES, el despojo de las becas y la disminución de los estipendios impactará negativamente en ellos, ya que muchos de los estudiantes únicamente contaban con el ingreso de la beca monetaria, o estudiaban todo el día y no debían de gastar dinero en comida, porque contaban con la beca de almuerzo.
“Tengo compañeros de clases cuyo único ingreso era la beca monetaria. A mí la beca monetaria me ayudaba a cubrir mis gastos, porque eran 30 dólares los que recibía. Ahora con la disminución, ni mis gastos como estudiantes me va a cubrir. No va a solventar nada. Aquí en la UNP el pago de las gestiones es mucho mayor que en otras universidades públicas, como los certificados de notas”, dice otra estudiante, de 22 años y que desde 2022 es solicitante de beca. “Mis compañeros están indignados”, continúa.
Esta estudiante de tercer año que solicitó el anonimato para evitar represalias en su contra, cuenta que trabaja desde el año pasado debido a que sus padres dejaron de cubrir sus gastos estudiantiles, porque la situación económica de su casa empeoró. Para ella, los 30 dólares de la beca monetaria era un ingreso extra que aliviaba sus gastos. Ahora la idea de dejar de trabajar es impensable, asevera.
Si bien su promedio académico es mayor de 95% y en teoría debería ser aceptada para obtener la beca monetaria, advierte que es probable que no se la den porque el objetivo es disminuir la cantidad de gente beneficiaria.
Los estudiantes de la UNP exponen que cada vez hay mayores cambios administrativos y académicos que únicamente los perjudican desde que ocurrió la confiscación en febrero de 2022.