Estas son las razones por las que Facebook elimina maquinaria de “troles” del régimen

La red de cuentas que eliminó Meta (antes Facebook) era una de las operaciones “más intergubernamental que hemos detectado hasta el día de hoy, por incluir múltiples entidades estatales”. Operaban en Telcor, la Corte Suprema de Justicia y el INSS. Estaban diseñadas para engañar a personas alrededor del mundo. Información respalda reportajes que publicó DIVERGENTES en junio, en los que se develó cómo operaban y se financiaban estas “turbas virtuales”.

La oficina instalada en Correos de Nicaragua destinada a producir propaganda y desinformación en redes sociales. Divergentes.

La propaganda digital del régimen Ortega-Murillo ha experimentado un zarpazo sin precedentes: la granja de trolls del partido de gobierno Frente Sandinista, que operaba en redes sociales desde instituciones públicas, fue eliminada este lunes por la empresa Meta, propietaria de Facebook, WhatsApp e Instagram. Esta red de cuentas era parte de campañas “diseñadas para engañar a las personas alrededor del mundo, ya sean extranjeras o locales”, según el informe que publicó la compañía llamado Comportamiento Inauténtico Coordinado (CIB, por sus siglas en inglés). 

Meta informó que la red constaba con 937 cuentas de Facebook, 140 páginas, 24 grupos y 363 cuentas en Instagram. “Esta operación se dirigía a audiencias locales y estaba vinculada al gobierno de Nicaragua y el partido Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN). “Detectamos una parte de esta red a través de una investigación interna sobre comportamiento inauténtico coordinado en la región, y el resto tras revisar reportes públicos sobre esta actividad”, cita el informe.

En junio de este año, cuando comenzaba la cacería contra las personalidades electorales en el país, DIVERGENTES publicó un reportaje, en coordinación con Nicaragua Actual, en el que se develó cómo operaban las turbas digitales que fueron eliminadas por Meta este lunes. Dentro del aparato de propaganda digital participa Julio Avilés Sánchez, hijo del jefe del Ejército de Nicaragua, Julio César Avilés. Dichas plataformas digitales operan en Correos de Nicaragua y en la Alcaldía de Managua, Injuve, entre otras instituciones públicas. 

Meta informó que en por lo menos un caso, la red intentó que se eliminara una serie de publicaciones que expusieron esta actividad, incluyendo fotos de lo que parece ser una sala de trolls dentro del edificio de TELCOR en Managua. “Este intento también falló. A pesar de ser poco exitosa, esta táctica muestra cómo la organización buscaba controlar el ecosistema informativo cotidiano de los nicaragüenses”, agregó el documento. 

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Red operaba en instituciones públicas

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#Meta eliminó una red de cuentas troles ligadas al régimen Sandinista en Nicaragua. Te contamos en #enunminuto #fyp #parati #facebook #elecciones2021

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El informe vio la luz gracias a que Meta tiene a cargo a equipos de monitoreo e investigación para detectar redes para manipular el debate público y lograr un objetivo estratégico, en donde las cuentas falsas son parte central de la operación. “Esta es una de las operaciones de trolls más marcadamente intergubernamental que hemos desactivado hasta el día de hoy, por incluir múltiples entidades estatales”, informó la compañía, sobre las turbas virtuales sandinistas.

La operación era ejecutada por empleados públicos del Instituto Nicaragüense de Telecomunicaciones y Correos (TELCOR), principalmente, pero también desde otras instituciones, como la Corte Suprema de Justicia y el Instituto Nicaragüense de Seguridad Social (INSS).

La campaña tenía presencia en distintas plataformas, con una red compleja de marcas de medios de comunicación en Facebook, TikTok, Instagram, Twitter, YouTube, Blogspot y Telegram, así como sitios web vinculados a estas. “Publicaban contenido positivo acerca del gobierno y comentarios negativos sobre la oposición, usando cientos de cuentas falsas para promover sus posts”, informó Meta.

En junio, DIVERGENTES también publicó una investigación que demostró cómo el régimen sandinista entregó más de 100 millones de córdobas en contratos publicitarios a periodistas oficialistas, medios de comunicación dirigidos por los hermanos Ortega-Murillo, y empresas de publicidad que también están vinculadas a la familia presidencial. 

La compañía puso a esta red como un ejemplo de cómo funciona una “granja de trolls” – un esfuerzo coordinado de operadores que comparten una ubicación para corromper o manipular el discurso público mediante el uso de cuentas falsas para crear identidades falsas en diversas plataformas y engañar a la gente acerca de quién está detrás de la operación. 

El informe explica que la red comenzó a operar en abril de 2018, cuando el gobierno nicaragüense reprimió una oleada de protestas lideradas por estudiantes a nivel nacional. Inicialmente, entre 2018-2019, se concentró en desacreditar a los manifestantes, esparcir información falsa y reportar masivamente a personas que estaban en contra del gobierno. Pero desde finales de 2019, conforme la red se volvió sofisticada, pasó de criticar a la oposición y a los manifestantes a amplificar sus propias marcas de medios y contenido pro gobierno. “La campaña pareció tener por objetivo una saturación del ecosistema de Internet en Nicaragua con mensajes a favor del gobierno”.

Los trabajadores de esta red tenían un horario definido: de 9 a.m. a 5 p.m., de lunes a viernes, con una hora de receso al mediodía y con personal reducido los fines de semana.

La empresa detalló que al menos 585,000 cuentas seguían una o más de estas cuentas en Facebook, y unas 74,500 se unieron a uno o más de estos grupos. Cerca de 125 mil cuentas siguieron a una o más de estas cuentas en Instagram. En total, invirtieron cerca de 12 mil dólares en publicidad en Facebook e Instagram, pagada principalmente en moneda nicaragüense y dólares estadounidenses.

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