Doña Violeta Barrios de Chamorro, expresidenta de Nicaragua, fue trasladada este martes 17 de octubre hacia Costa Rica, donde estará bajo el cuidado de su familia, la mayoría de ellos exiliados a raíz de la persecución política del régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo desde la crisis política de abril de 2018.
La familia Chamorro Barrios informó por medio de un comunicado que doña Violeta fue trasladada este martes por vía aérea desde Managua con destino a San José, la capital costarricense, donde será cuidada con “el amor de su familia, junto a personal de salud y médicos especializados”.
En un comunicado, la familia informó que desde septiembre de 2018, cuando sufrió un accidente cerebrovascular, doña Violeta permaneció en su residencia en Las Palmas, en Managua, “bajo el cuidado y el amor de su familia, acompañada por personal de salud especializado”.
Persecución contra la familia Chamorro
Desde que inició la crisis política de 2018, la persecución del régimen Ortega-Murillo se ha incrementado en contra de la familia Chamorro. Dos de sus hijos, Cristiana y Pedro Joaquín fueron apresados en 2021 por mostrar intenciones de postularse a la Presidencia, hasta que finalmente fueron desterrados en febrero de 2023.
Recibe nuestro boletín semanal
Su otro hijo, Carlos Fernando, se ha exiliado en dos oportunidades, la última de ellas hace dos años. Los tres hijos de Violeta han sido desnacionalizados y confiscados. La dictadura también confiscó, en agosto de 2021, las instalaciones del diario La Prensa, del cual doña Violeta era socia y en algún momento estuvo al frente del periódico.
En junio de 2019, durante su primer exilio, su hijo, Carlos Fernando Chamorro, dijo a La Prensa que lo más duro de haber salido de Nicaragua era no poder estar junto a su madre, pues “ella está en una condición de salud delicada, reservada”.
“Quisiera acompañarla (…) Y es muy doloroso esa ausencia, esa distancia”, añadió Chamorro. Al regresar al país, cinco meses después, el periodista dijo que lo primero que iba a hacer era abrazar y besar a su madre. Sin embargo, menos de dos años después, Carlos Fernando se exilió nuevamente porque el régimen quería apresarlo.
Claudia Lucía Chamorro es la única de los cuatro hijos de Violeta que aún vive en Nicaragua.
La familia Chamorro Barrios agradeció “profundamente” a los médicos, personal de salud, trabajadoras de servicio, que cuidaron de doña Violeta en todos estos años que estuvo en Nicaragua. “Agradecemos a todas las personas que siempre la acompañan con sus oraciones y se mantienen pendientes de su estado de salud, que continúa siendo delicado, pero estable”, finalizó el comunicado.
“La presidenta de la paz”
Doña Violeta Barrios de Chamorro fue Presidenta de Nicaragua entre 1990 y 1997. A pesar de que meses antes las encuestas preveían que el Frente Sandinista arrasaría en las elecciones, ya que aún gozaba de altos niveles de popularidad, la realidad fue que Barrios de Chamorro acabó alcanzando el 54 % de los votos frente al 41 % de Daniel Ortega.
Su gobierno fue el primero surgido de unas elecciones democráticas tras décadas de guerras civiles y una revolución (sandinista) frustrada. Fue la primera mujer que gobernó en el continente americano.
Su período presidencial es destacado por lograr una transición pacífica, no exenta de sobresaltos y alzamientos armados. Por eso es conocida como “la presidenta de la paz”. El propio Daniel Ortega destacó en una entrevista que lo más positivo de la gestión de Barrios de Chamorro fue la reconciliación y la despolarización del país. “¿Quién sabe qué hubiera pasado aquí si el presidente hubiese sido otro de los que se mencionaban como candidatos a la presidencia y se la disputaron a doña Violeta en la UNO (Unión Nacional Opositora)?”, dijo Ortega.
Estuvo casada con Pedro Joaquín Chamorro, periodista y director del diario La Prensa, quien fue asesinado a balazos el 10 de enero de 1978. Pedro Joaquín se convirtió en el “mártir de las libertades públicas”. La pareja tuvo cuatro hijos: Pedro Joaquín, Claudia Lucía, Cristiana y Carlos Fernando.